2 de abril de 2007

Duero







Atardecer en el Duero
mientras la silueta de la Catedral
emerge en el horizonte.
Para qué decir nada.


6 comentarios:

  1. ¡Qué amor por la tierra! ¡Es impagable!

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  2. (belíssimas as fotos como sempre...)

    sinto
    a anestesia da saudade

    o êxtase do encanto

    a prata da memória...

    (nada mais a dizer senão o peitO)



    a.braçO ~

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  3. Nada como esa imagen para enmudecer...

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  4. Qué delicadas fotos... Algún día vas a tener que invitarme a pasear por esa orilla, a la hora exacta de la puesta de sol.
    Un beso, Concha.

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  5. Ola... eu sou a Ana, amiga da Choninha.... vim deixar-te um beijinho....

    Amigas dela são minhas amigas tambem....

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  6. No sé por qué siempre nos sujeta a los lugares el agua. Bueno, eso me pasa a mí :) o el mar, o un río, agua que se mueve, que suena.
    Mi vida está atada al agua. Quizá sea que en la piel del agua se puede escribir la leve historia de la existencia.
    O que nos mueve el alma.

    Un beso, Anatema.

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